Notas y Publicaciones

ADAPTARSE A LOS CAMBIOS

Entrevistador: Dr. ¿Podría definirnos qué es el stress?

Dr. Sidelski: ¿Sabe? Aún no existe una definición de stress en que la mayoría que nos dedicamos a investigar el tema estemos de acuerdo. A mí me gusta diferenciar dos estados diferentes bajo el nombre de stress. Al primero lo llamo estado de alerta. Al segundo Burnt o Colapso; lo que popularmente se suele denominar “estar estresado”.

Entrevistador: O sea, como dos formas diferentes de estar bajo stress?

Dr. Sidelski: Me gusta como lo ha expresado. Usted verá; ante una demanda del entorno (que puede ser desde lo que llamamos contrariedades o fastidios cotidianos (hassles), hasta los grandes acontecimientos vitales) el individuo procede a evaluar sus recursos para afrontar esa demanda. Si el individuo percibe que la demanda (o la suma de estas) excede sus recursos, entonces se activa el sistema de alerta del organismo y el individuo se percibe en situación de tensión.

Entrevistador: ¿Esto sería algo así como que el individuo se prepara especialmente que esa demanda generando un estado de tensión?

Dr. Sidelski: Perfecto. Que se entienda: esto es la clave. El organismo activa sistemas biológicos y psicológicos, que en reposo no emplea, con el objetivo de estar mejor preparado para afrontar la situación. De este modo puede pasar a la acción con mayor efectividad, resolver y volver así al estado de reposo.

Entrevistador: No entiendo doctor ¿el stress dónde está?

Dr. Sidelski: Al producirse esta activación ocurren manifestaciones físicas y una vivencia psicológica de tensión, que si es apropiada en tiempo y espacio es vivida como un estado lógico ante la resolución de un problema.

Pero cuando la forma de reacción es exagerada en intensidad o prolongada en el tiempo, el individuo se percibe en una situación de sobrecarga y posible colapso. Si esto se prolonga aún más, puede conducir a lo que los psiquiatras llamamos depresión mayor. Otras complicaciones frecuentes son empeoramiento de otras patologías médicas o psicológicas así como el aumento de la probabilidad de manifestarse condiciones patológicas latentes.

Entrevistador: ¿Y cómo puede una persona darse cuenta que está en estado de alerta o próxima al colapso?

Dr. Sidelski:Me parece muy apropiada su pregunta. Las manifestaciones psicológicas y físicas que pueden presentarse son muy variadas. No queremos, bajo ningún concepto, alarmar a las personas dando una lista de síntomas que pueden presentarse fuera del contexto de su situación vital particular. El concepto de stress se halla sobredimensionado justamente por este motivo.

La misma reacción de tensión, psíquica o física, puede ser una reacción perfectamente saludable en una situación determinada, mientras que puede resultar desadaptiva y hasta perjudicial en otro contexto.

Los que nos dedicamos a este tema enseñamos a nuestros pacientes a que reconozcan lo que llamamos unidades subjetivas de stress (USS). Entrenamos a las personas para que reconozcan como su cuerpo y su mente particulares manifiestan este estado de alerta. De este modo, las personas no sólo aprenden a reconocer en qué estado de alerta se encuentran sino que además, comienzan a detectar sus estresores personales.

Entrevistador: ¿O sea que una persona puede aprender a reconocer qué demandas de su entorno son particularmente estresantes para ella?

Dr. Sidelski: Exacto. Veo que usted me ha comprendido. De este modo luego podemos trabajar con ello.

Entrevistador: Suena interesante, pero, sinceramente doctor, en la realidad, supongamos que yo estoy sobrecargado de trabajo, o que tengo serios problemas económicos. ¿Para qué sirve todo esto?

Dr. Sidelski: Realmente es muy acertada su observación. Nosotros trabajamos en tres niveles;

1) En el más superficial evaluamos si es necesario que el individuo desarrolle alguna habilidad, ya sea entrenándose en alguna tarea específica o en habilidades sociales e interpersonales. Por ej. Lo más frecuente, en relación al stress, es la dificultad que muchas personas presentan para hacer valer sus derechos personales, o dicho más familiarmente, su dificultad para decir NO, que en general lo lleva a sobrecargarse de actividades. Esta habilidad se desarrolla mediante lo que llamamos Entrenamiento Asertivo, que consiste en aprender a manifestar los derechos personales de un modo socialmente aceptable (asertivamente).

2) En un nivel más profundo, evaluamos si existe algún problema en relación al Sistema de Creencias: detectamos si existe lo que llamamos Distorsión Cognitiva, ya sea en relación a las atribuciones o a la predicciones referidas a realizar o dejar de realizar alguna tarea. Hay personas que perciben exageradamente las consecuencias de una tarea que no esté “perfectamente” realizada. Esto lo trabajamos con técnicas de autodiálogo guiado, imaginación dirigida o con hipnosis.

3) Finalmente evaluamos el nivel de los valores. Los tiempos han cambiado de una forma tan extraordinaria, que cada vez más frecuentemente vemos la necesidad de realizar lo que llamamos Clarificación de Valores. Con ciertas técnicas específicas ayudamos a la persona a que revea su escala de valores. Cuando una persona actúa en contra de valores que son esenciales para ella, su psiquis se siente amenazada. Muchas personas encuentran sus trabajos estresantes porque en realidad sienten que están traicionando valores esenciales. Cuando esto se clarifica, la persona queda en una situación psicológica muy diferente para resolver el problema. Esta situación es particularmente habitual en las madres que deben o quieren trabajar.

Entrevistador: Bueno doctor, le agradezco su tiempo y su explicación. ¿Quisiera agregar alguna otra cosa?

Dr. Sidelski: Para despedirnos quisiera recordarle al lector algunas palabras del gran maestro Milton Erickson: “Hay muchas formas de adaptarse a los cambios, una es por medio de síntomas... pero hay formas más divertidas”.

 

 

Dr. Daniel Sidelski

Centro de Psicología Clínica, Laboral y Forense

 

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