Notas y Publicaciones

También denominado SÍNDROME DE INTESTINO IRRITABLE.
Es una patología de la función intestinal, sin causa orgánica. Es decir no hay un órgano lesionado.
Los síntomas físicos característicos son los siguientes y pueden presentarse algunos o todos así como hay manifestaciones leves o agudas de los mismos:

• Dolores y molestias abdominale
• Hinchazón abdominal
• Espasmos
• Flatulencia excesiva
• Mucosidad de la materia fecal
• Cambios en los hábitos de evacuación
• Diarrea
• Constipación
• Alternancia de diarrea y constipación

Se la considera un enfermedad crónica con períodos de remisión y otros de exacerbación. La padece entre un 10 a 20% de la población. El 75% de quienes lo sufren no hacen consultas y se presenta con más frecuencia en las mujeres.

 

CARACTERÍSTICAS DE LA PERSONALIDAD

Las personas que presentan este trastorno suelen tener algunas carácterísticas de personalidad en común:

• Estado de tensión crónica
• Irritabilidad o enojo contenido
• Insatisfacción
• Hostilidad
• Baja autoestima
• Pensamientos negativos
• Necesidad de control
• Necesidad de aprobación
• Poco cuidado de sí
• Rigidez de pensamiento

Es una enfermedad que suele generar un sentimiento de vergüenza y puede llevar a un gran deterioro en la calidad de vida por las limitaciones que conlleva, tanto en lo social como en lo laboral. Las relaciones familiares pueden verse afectadas.
Son personas a las que les cuesta tener una actitud reflexiva y por su rigidez suelen tener conflictos con el medio.

 

CAUSAS

Se desconocen las causas que dan origen a esta patología. Se reconoce la influencia del stress en quienes lo padecen.
Son personas que tienen una mayor sensibilidad al estímulo rectal.
Suele presentarse en comorbilidad (asociado) con cuadros de Fobia, Depresión, Trastornos de Alimentación, Trastornos Obsesivo Compulsivos y cuadros Psicóticos.
En algunos casos los pacientes presentan en su historial antecedentes de abuso sexual en la niñez.
En las mujeres suele haber una agudización en el período menstrual.
Los desencadenantes pueden se variados, pero en general se trata de situaciones que incrementan el cuadro de ansiedad y stress como divorcios, mudanzas, muertes de seres queridos y situaciones de conflicto o incertidumbre en cualquier área de la vida o bien, relaciones cercanas conflictivas que generan un estado de tensión cotidiano y permanente.

 

TRATAMIENTO

Requiere un abordaje multidisciplinario, con asistencia clínica, nutricional, psicológica y en algunos casos psiquiátrica.
Desde el punto de vista de tratamiento psicológico, se trabajará para que la persona pueda descargar adecuadamente la tensión, con distintas formas de abordaje, según el cuadro y el momento del tratamiento. Se deberá apuntar a la aceptación del cuadro y a trabajar las situaciones de evitación, así como los aspectos psicodinámicos de cada caso, favoreciendo a través de la palabra, la expresión simbólica de lo que “actúa en su cuerpo”.

 

 

Lic. Silvana Santoro

Centro de Psicología Clínica, Laboral y Forense

 

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